TEMARIO

sábado, 15 de octubre de 2011

HERNIA DISCAL - CUIDADO CONSERVADOR

HERNIA DISCAL - Cuidado conservador

No todos los pacientes con dolor cervical y de espalda requieren cirugía. De hecho, la inmensa mayoría consigue aliviar los síntomas mediante terapias no quirúrgicas como ejercicio, medicación, fisioterapia y quiropráctica.

Se estima que 8 de cada 10 personas sufrirán dolor de espalda en algún momento de su vida; junto con la artrosis, la hernia de disco es una de sus principales causas. La hernia discal más frecuente es aquella que se presenta en la zona lumbar baja, y ocasiona el comúnmente llamado lumbago y ciática. Le sigue en frecuencia aquella que se produce a nivel cervical. Además, es más frecuente entre los hombres de mediana edad y edad avanzada. Todo lo que hay que saber.

La columna vertebral está formada por distintas vértebras (la parte ósea), separadas por partes blandas que reciben el nombre de discos. Dentro de cada disco existe una parte gelatinosa. Por un esfuerzo brusco o exagerado o por un esfuerzo repetido pueden se romperse o desplazarse presionando los nervios entre las vértebras y generando dolor en la parte baja de la espalda y/o miembros inferiores.

En realidad hay muchos tipos de hernias discales y es por eso que hay que tener cuidado pues un porcentaje alto de la población lo tiene y es asintomático.
“Por ejemplo, los discos tienen un importante componente de agua. Con los años tienden a deshidratarse y esto lleva a una disminución del espacio discal con abombamientos discretos hacia el interior de las vértebras Esto suele verse a menudo en pacientes con muy poca sintomatología y, hay que tener cuidado porque en realidad tienen una protrusión discal o hernia menor a la cual no hay que hacerle nada. Si estos pacientes tienen alguna molestia en la espalda por artrosis u otra causa, sería un error tratarles quirúrgicamente el disco. Por otra parte, las hernias propiamente dichas se pueden clasificar por la cantidad y forma de estar herniadas y por la dirección hacia donde se herniaron. De acuerdo a la forma y cantidad de disco herniado las podemos clasificar en protruídas, cuando forman un pequeño bulto hacia atrás, extruídas, cuando rompen el anillo y migradas o con secuestro cuando se suelta directamente una porción en el interior del canal raquídeo.

Otras opciones: cirugías

Esto se logra mediante una incisión de cinco o seis centímetros con alivio en la mayoría de los casos. Mediante la microcirujía convencional o los procedimientos microquirúrgicos percutáneos, se pueden lograr los mismos objetivos con incisiones menores y menor trauma de los músculos. De todas formas no debe olvidarse que lo principal es conseguir una buena liberación de los nervios, independientemente de los métodos de abordaje.

“Cuando hablamos de una hernia pura, blanda, y voluminosa en una columna relativamente sana, y que le da muchos síntomas al paciente, lo más aceptado mundialmente es la remoción de una parte del disco de forma tal que no comprima a la o las raíces involucradas. Como podrá imaginarse, tratándose de una dolencia tan frecuente hay cientos de tratamientos postulados. También hay verdades a medias. Por ejemplo que la mayoría de las hernias de disco se curan sin cirugía. Es cierto, seguramente yo tal vez tenga una hernia menor y, si en algún momento me da alguna molestia con reposo, algún analgésico o mio-relajante voy a mejorar. Esto es lo más frecuente”, dice el doctor. Y continúa: “Pero cuando un disco está francamente herniado, comprimiendo una raíz y el paciente tiene síntomas y signos de sufrimiento radicular lo indicado es de alguna manera descomprimir esa raíz. Aquí entramos también en múltiples posibilidades de tratamientos. Cualquiera de ellos que permita resecar la parte herniada del disco -en muchos casos se remueve más cantidad para minimizar la posibilidad de residivas- es el adecuado. Si esto se hace por técnicas convencionales, por microcirugía, o por procedimientos percutáneos son preferencias particulares que nacen de la experiencia de cada cirujano. Nosotros desde hace muchos años practicamos la microcirugía convencional y, desde hace un tiempo utilizamos una técnica similar pero que nos permite hacer la microcirugía a través de un pequeño canal hueco de 14 mm, instalado en forma percutánea. Con esto evitamos en muchos casos hacer incisiones mayores. Nos entusiasmamos mucho por los buenos resultados pero también recordamos que estábamos muy contentos con la microcirugía convencional de la cual esta es una variante menos invasiva aún. Pero quisiera que quede claro lo que mencioné previamente. La cirugía de hernia de disco las practican muchos cirujanos de experiencia, sin o con microscopio y con buenos resultados. Lo importante es liberar la raíz comprometida, por supuesto sin dañar nada. El tipo de técnica que se utilice es una preferencia de cada uno”.

Cómo elegir el tratamiento y cómo prevenir

De todas formas, enfatiza ,lo más importante es efectuar una buena liberación del nervio afectado. Si bien hay una tendencia a efectuar procedimientos mínimamente invasivos para los abordajes, solo deben hacerse cuando se puedan lograr los mismos resultados que con las cirugías convencionales, las cuales siguen vigentes para la mayoría de los pacientes. Los cirujanos deben operar con las técnicas con las cuales se sientan más seguros y los pacientes no deberían presionar a los médicos por incisiones menores, perdiendo de vista el objetivo principal de la cirugía. Es por ello que siempre les aclaramos a nuestros pacientes que es posible (aunque poco probable) que se necesite convertir una cirugía percutánea a una microcirugía convencional ampliando la incisión.

La mejor prevención es realizar ejercicios y mantener una buena condición física y además, tener buena postura.

links interesantes:
http://www.sld.cu/libros/libros/libro3/manual2.pdf
http://www.neuros.net/es/hernia_discal_lumbar.php

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