TEMARIO

domingo, 14 de septiembre de 2014

LOS MISERABLES, UNA OBRA MAS QUE NUNCA DE NUESTRO TIEMPO

Es una de las novelas mas hermosas y reflexivas que leído en mi vida.

La historia gira en torno a Jean Valjean, ex presidiario que busca redimirse de un delito menor que lo condenó a 19 años de prisión (haber robado un pan porque su familia moría de hambre), hay historias paralelas de otros personajes que, del mismo modo que Valjean, aunque por otros motivos, también son miserables. Valjean, decide entregar su vida en favor del bien de los demás, transformándose en compasivo y bondadoso, pero que a pesar de ello vive huyendo y obligado a ocultar su identidad. Otros personajes son: Los Thenardier delincuentes y faltos de moral. Gavroche , niño abandonado por sus padres que vagan por las calles. Fantina mujere entregada a la prostitución y degradada moralmente para poder subsistir . Javert hombre que queriendo ser irreprochable se convierte en esclavo de la ley. Se llega a una conclusión que la ley es humana, y por lo tanto falible (es el caso de Javert, el policia que persigue a Valjean) y al darse cuenta de esta verdad y de que la bondad, la compasión y el perdón existen, se siente también un miserable.


EN SINTESIS: todos los personajes de esta gran obra son seres condenados por distintas razones a vivir una vida plagada de desgracias, abandono, hambre, ignorancia, persecución, miseria y desdicha. Por todas estos motivos esta novela se llama "Los miserables".

Hay una frase del libro que explica en gran parte el sentido del libro:

...."Ser puesto en libertad no es lo mismo que ser libre. Se sale de la prisión, pero no de la condena".

y otra...    "el hombre tiene un tirano: la ignorancia".

Los Miserables

Prólogo: 

Mientras a consecuencia de las leyes y de las costumbres exista una condenación social, creando artificialmente, en plena civilización, infiernos, y complicando con una humana fatalidad el destino, que es divino; mientras no se resuelvan los tres problemas el siglo: la degradación del hombre por el proletariado, la decadencia de la mujer por el hambre, la atrofia del niño por las tinieblas; en tanto que en ciertas regiones sea posible la asfixia social; en otros términos y bajo un punto de vista más dilatado todavía, mientras haya sobre la tierra ignorancia y miseria, los libros de la naturaleza del presente podrán no ser inútiles.

Hauteville-House, 1 de enero de 1862

Los protagonistas están tan estereotipados que Hugo describe a la sociedad francesa de la época a través de un puñado de personajes. Todos ellos tienen algo de miserable, cada cual a su modo:

Jean Valjean, miserable por no permitirse ser feliz, por consumirse en la culpabilidad y la necesidad de redención.
Fantine y Cosette, miserables por tener un alma buena e inocente en una época en la que ser pobre y bueno era una condena al sufrimiento.
Los Thenardier, miserables de espíritu, malvados, mezquinos, cuya vileza no conoce límites.
Javert, miserable por anteponer la ley a su conciencia, por no ver más allá de lo que muestran los ojos.
Marius, miserable por creer, como todos los jóvenes, que son poseedores de las verdades absolutas y por ver que se equivoca demasiado tarde.

Qué hace a un hombre como Jean Valjean, dejar el camino de la violencia, el rencor, el odio?
Que empuja a un hombre a denunciarse?

Qué obliga a salvar a un hombre de un delito que no ha cometido, para salvarse a uno mismo. La propia ley de la naturaleza, la ley de la supervivencia, el antiguo y asentado instinto de sobrevivir, pero y qué hacemos con la conciencia, la metemos en un baúl, la acallamos y enmudecemos, imposible, la conciencia sigue ahí impasible en el tiempo. Pero qué poder tiene la conciencia para que nuestro instinto principal, sobrevivir, sea una marioneta en sus manos?

Después se preguntó si era el único que había obrado mal en tal fatal historia; si no era una cosa grave que él, trabajador, careciese de trabajo; que él, laborioso, careciese de pan; si, después de cometida y confesada la falta, el castigo no había sido feroz y extremado; si no había más abuso por parte de la ley en la pena que por parte del culpado en la culpa;si el recargo de la pena no era el olvido del delito, y no producía por resultado el cambio completo de la situación, reemplazando la falta del delincuente con el exceso de la represión, transformando al culpado en víctima, y al deudor en acreedor, poniendo definitivamente el derecho de parte del mismo que lo había violado; si esta pena, complicada por recargos sucesivos por las tentativas de evasión, no concluía por ser una especie de atentado del fuerte contra el débil, un crimen de la sociedad contra el individuo; un crimen que empezaba todos los días; un crimen que se cometía continuamente por espacio de diecinueve años.

Se preguntó si la sociedad humana podía tener el derecho de hacer sufrir igualmente a sus miembros, en un caso su imprevisión irracional, y en otro su impía previsión; y de apoderarse para siempre de un hombre entre una falta y un exceso; falta de trabajo, exceso de castigo.

Se preguntó si era justo que la sociedad tratase así precisamente a aquellos de sus miembros peor dotados en la repartición casual de los bienes y, por lo tanto, a los miserables más dignos de consideración.
Presentadas y resueltas estas cuestiones, juzgó a la sociedad y la condenó.
La condenó a su odio.

La hizo responsable de su suerte, y se dijo que no dudaría quizá en pedirle cuentas algún día.
Se declaró a sí mismo que no había equilibrio entre el mal que había causado y el que había recibido; concluyendo, por fin, que su castigo no era ciertamente una injusticia, pero era seguramente una iniquidad.

Capitulo III. Libro CUARTO:

El choque entre mentalidades jóvenes ofrece la particularidad admirable de que no se puede nunca prever la chispa, ni adivinar el relámpago. ¿Qué va a brotar en un momento dado?. Nadie lo sabe. La carcajada parte de la ternura; la seriedad sale de un momento de burla. Los impulsos provienen de la primera palabra que se oye. La vena de cada uno es soberana. Un chiste basta para abrir la puerta de lo inesperado. Estas conversaciones son entretenimientos de bruscos cambios, en que la perspectiva varía súbitamente. La casualidad es el maquinista de estas discusiones.

Capitulo III. Libro QUINTO:

La conciencia es, pues, infatigable a invencible. Sin embargo, Jean Valjean sabía que esa noche libraba su postrer combate. Como le había sucedido en otras ocasiones dolorosas, dos caminos se abrían ante él, uno de lleno de atractivos, otro de terrores. ¿Por cuál debería decidirse?. Tenía que escoger una vez más entre el terrible puerto y la sonriente emboscada ¿Es, pues cierto, que habiendo cura para el alma, no la hay para la suerte? ¡Cosa horrible, un destino incurable! La cuestión era ésta: ¿De qué manera iba a conducirse ante la felicidad de Cosette y de Marius?

Libro Sexto. Capítulo I:

¿De qué se compone un motín? De todo y de nada. De una electricidad que se desarrolla poco a poco, de una llama que se forma súbitamente, de una fuerza vaga, de un soplo que pasa. Este soplo encuentra cabezas que hablan, cerebros que piensan, almas que padecen, pasiones que arden, miserias que se lamentan, y arrastra todo. ¿Adónde? al acaso. A través del Estado, a través de las leyes, a través de la prosperidad y de la insolencia de los demás.

 La convicción irritada, el entusiasmo frustrado, la indignación conmovida, el instinto de guerra reprimido, el valor de la juventud exaltada, la ceguera generosa, la curiosidad, el placer de la novedad la sed de lo inesperado, los odios vagos, los rencores, las contrariedades, la vanidad, el malestar, las ambiciones, la ilusión de que un derrumbamiento lleve a una salida; y en fin, en lo más bajo, la turba, ese lodo que se convierte en fuego: tales son los elementos del motín.

"Ciudadanos, suceda hoy lo que sea, venzamos o seamos vencidos, vamos a hacer una revolución. Así como los incendios iluminan toda la ciudad, las revoluciones iluminan todo el género humano. ¿Y qué revolución vamos a hacer? Acabo de decirlo, la revolución de la Verdad. Bajo el punto de vista político, no hay más que un solo principio: la soberanía del hombre sobre sí mismo. Esta soberanía del yo sobre el yo se llama Libertad, Allí donde dos o varias de estas soberanías se asocian empieza el Estado. Pero en esta asociación no hay ninguna abdicación. Cada soberanía concede una cierta cantidad de sí misma para formar el derecho común. Esta cantidad es la misma para todos. Esta identidad de concesión que cada uno hace a todos se llama Igualdad, El derecho común no es otra cosa que la protección de todos del derecho de cada uno. Esta protección se llama Fraternidad. El punto de intersección de todas estas soberanías que se agregan se llama Sociedad. Siendo esta intersección una unión, este punto es un nudo. De ahí que se llame vínculo social. Algunos dicen contrato social; lo que es lo mismo, por cuanto la palabra contrato se forma etimológicamente con la idea del vínculo. Entendámonos acerca de la igualdad; pues al paso que la libertad es la cima, la igualdad es la base. La igualdad, ciudadanos, no significa toda la civilización a nivel; una sociedad de matas grandes y de encinas pequeñas; un conjunto de envidiosos hostilizándose; es, civilmente, el camino abierto por igual a todas las aptitudes; políticamente, el mismo peso para todos los votos; religiosamente, el mismo derecho para todas las conciencias. La igualdad tiene un órgano, y este órgano es la instrucción gratuita y obligatoria. El derecho al alfabeto; por ahí se debe empezar. La escuela primaria impuesta a todos; la escuela secundaria ofrecida a todos; tal es la ley. De la escuela idéntica, sale la sociedad igual. ¡Sí! ¡Enseñanza! ¡Luz! ¡Luz! De la luz emana todo, y todo vuelve a ella. Ciudadanos, el siglo diecinueve es grande, pero el siglo veinte será feliz. Entonces no habrá nada que se parezca a la antigua historia; no habrá que temer, como hoy, una conquista, una invasión, una usurpación, una rivalidad de naciones a mano armada, una interrupción de civilización por un casamiento de reyes, un nacimiento en las tiranías hereditarias, un reparto de pueblos acordado en congresos, una desmembración por hundimiento de dinastía, un combate de dos religiones encontrándose frente a frente, como dos sombras sobre el puente del infinito; no habrá que temer al hambre, la explotación, la prostitución por miseria, la miseria por falta de trabajo, el cadalso, la cuchilla, las batallas, y todos esos latrocinios del azar en la selva de los acontecimientos. Casi pudiera decirse que no habrá ya acontecimientos. Reinará la dicha. El género humano cumplirá su ley, como el alma y el astro. El alma gravitará alrededor de la verdad, como el astro alrededor de la luz. Amigos, la hora en que nos encontramos, y en que os hablo, es una hora sombría; pero tales son las terribles condiciones para la compra del porvenir. Una revolución es un peaje. ¡Oh!, el género humano será libertado, sacado de su postración y consolado. Nosotros lo afirmamos desde esta barricada. ¿De dónde saldrá el grito de amor sino de lo alto del sacrificio? Oh, hermanos míos, éste es el lugar de unión de los que piensan y de los que sufren; esta barricada no está hecha ni de adoquines ni de vigas ni de hierro viejo; está hecha de dos montones, uno de ideas y otro de dolores. La miseria encuentra en ella al ideal. El día se abraza con la noche y le dice: “Voy a morir contigo, y tú vas a renacer conmigo”. Del estrecho abrazo de todas las aflicciones brota la fe. Los sufrimientos traen aquí su agonía, y las ideas su inmortalidad. Esta agonía y esta inmortalidad van a mezclarse y a componer nuestra muerte. Hermanos, el que muere aquí, muere en la irradiación del porvenir, y nosotros entramos en una tumba penetrada de aurora.


"A los ignorantes enseñadles lo más que podáis; la sociedad es culpable por no dar instrucción gratis; es responsable de la oscuridad que con esto produce. Si un alma sumida en las tinieblas comete un pecado, el culpable no es en realidad el que peca, sino el que no disipa las tinieblas"

LA CANCIÓN DEL PUEBLO

Do you hear the people sing 
Lost in the valley of the night? 
It is the music of a people 
Who are climbing to the light. 

For the wretched of the earth 
There is a flame that never dies. 
Even the darkest night will end 
And the sun will rise. 

They will live again in freedom 
In the garden of the Lord. 
They will walk behind the plough-share, 
They will put away the sword. 

The chain will be broken 
And all men will have their reward. 
Will you join in our crusade? 
Who will be strong and stand with me? 

Somewhere beyond the barricade 
Is there a world you long to see? 
Do you hear the people sing? 
Say, do you hear the distant drums? 

It is the future that they bring 
When tomorrow comes! 
Will you join in our crusade? 
Who will be strong and stand with me? 

Somewhere beyond the barricade 
Is there a world you long to see? 
Do you hear the people sing? 
Say, do you hear the distant drums? 

It is the future that they bring 
When tomorrow comes... 
Tomorrow comes!

Os dejo también la versión española, de la canción del pueblo, porque las voces que cantaron en el Musical de Madrid para mi gusto son mejores que el londinense.

Triller video1                                 La canción del pueblo (video 2)
Oyes al pueblo cantar? (video 3)   On mt own (video 4)
Los Miserables (final- video5)      I dreamed a dream (video6)


  

  

   

Ojala aplicáramos con mas frecuencia el perdón y la misericordia, porque, aunque no lleguemos a ver las consecuencias, siempre algo bueno quedara, aunque sea una conciencia tranquila... 

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